La sociedad siempre tuvo fascinación por imaginar y predecir el futuro, pero sabemos que las respuestas que buscamos no están en bolas de cristal. El objeto místico actualmente está reservado a escenarios de películas o piezas teatrales y en el mundo real el instrumento asume el formato de herramientas sofisticadas realmente capaces de anticipar tendencias.
Entonces, ¿es posible predecir el futuro? Sí. Por lo menos en el mundo de los negocios. Para ello, se aplican técnicas de Advanced Analytics, donde se analizan una expresiva cantidad de datos, en muchos casos con la utilización de inteligencia artificial, para descubrir estándares o tendencias que generen insights y establezcan previsiones.
De acuerdo con la consultoría Gartner, entre las técnicas más comunes presentes en Advanced Analytics están el análisis gráfico, semántico y de sentimientos, análisis de redes y agrupaciones, estadística multivariada, minería de datos o textos, aprendizaje de máquina, procesamiento de eventos complejos, redes neurales, entre otras.
Cada una de ellas examina diferentes tipos y formatos de datos que servirán de base para análisis predictivos y son explorados por los más diferentes segmentos de mercado como seguros y otros servicios financieros, productos médicos y farmacéuticos, telecom, industrias de suministros, minorista y bienes de consumo, etc. La lista es infinita, pero lo que hace que esos sectores sean comunes es la abundante cantidad de datos disponibles y un mindset data-driven.